Tradicionalmente pensamos en los pretzels en su clásica forma anudada, pero hay una forma de transformar este clásico snack para crear una receta realmente ganadora a la hora del almuerzo: los rollitos de pretzels.
¡Deja que el sabor salado y dulce de estos panecillos lleve tus sándwiches a nuevas alturas!
Lo que hace que algo sea un pretzel es una inmersión en un baño de bicarbonato de sodio antes de ser horneado; el bicarbonato de sodio le da al pretzel esa corteza oscura reconocible y su sabor ácido. Tradicionalmente, los pretzels se bañan en una solución de lejía, pero la lejía no es tan fácil de conseguir y, de hecho, es peligrosa antes de hervirla, por lo que hay que tener mucho cuidado al trabajar con ella. Así que es mejor el bicarbonato de sodio.
Sabiendo cómo un pretzel se convierte en un pretzel, piensa en todas las posibilidades: galletas saladas, panecillos, panes de hamburguesa, etc. Para artículos delicados como las galletas saladas, puedes usar una botella de spray o una brocha de pastelería para aplicar la solución de bicarbonato de sodio.
Lo que esto significa también es que puedes utilizar tu masa de panecillos favorita y convertirla en panecillos de pretzel simplemente hirviéndolos en una mezcla de bicarbonato de sodio y azúcar después de que suban y justo antes de hornearlos.
A continuación, una de mis recetas favoritas para un bollo sencillo. Es robusto, denso y aguanta bien el hervor. Además, mejora con un poco de tiempo, así que adelante, mezcla la masa y luego déjala subir lentamente en la nevera durante un día o dos. Eso le dará aún más sabor a tus pretzel.
Parte 1: Una sencilla masa de aceite de oliva
Adaptado de Date Night In
Ingredientes:
- 1 cucharadita de levadura seca activa
- 1⁄2 cucharadita de azúcar granulada
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 3⁄4 taza de agua tibia
- 2 1/2 tazas de harina de uso general
- 1 1⁄2 cucharaditas de sal kosher
Paso 1:
Prepara esta masa el día anterior o hasta 2 días antes de que pienses utilizarla.
Paso 2:
En el bol de una batidora con gancho de amasar, combina la levadura, el azúcar, el aceite de oliva y el agua. Añade la harina y la sal.
Empieza mezclando la masa a baja velocidad hasta que todo esté bien combinado. Aumenta la velocidad de la batidora a media baja y amasa durante 5 minutos. Alternativamente, puedes amasar de 7 a 10 minutos a mano, sobre una superficie ligeramente enharinada.
La masa debe despegarse de las paredes del bol y ser suave y elástica.
Paso 3:
Transfiere a un recipiente con tapa y refrigera de 24 a 48 horas. Asegúrate de que el recipiente deja espacio para que la masa doble su tamaño. Después de esta primera subida lenta, las bolas de masa se pueden congelar hasta que se vayan a utilizar. Descongelar en el frigorífico de 6 a 8 horas.
Parte 2: Los rollos de pretzel
Hace 4 rollos de pretzel
Ingredientes:
- 1 receta de masa de pizza con aceite de oliva (página 14)
- Mantequilla sin sal, para la sartén
- 3 cuartos de agua
- 3⁄4 taza de bicarbonato de sodio
- 1⁄3 taza de azúcar moreno
Paso 1:
Cuando estés listo/a para hacer los panecillos, saca la masa de la nevera y divídela en cuatro porciones iguales (es más fácil trabajar con ella cuando está fría).
Paso 2:
Enrolla cada trozo de masa hasta formar una bola de 5 centímetros. Si la masa se siente apretada y ya no quiere estirarse, apártala para que repose mientras trabajas en otra porción. Esto permite que el gluten se relaje, y será más fácil trabajar con él después de unos minutos.
Paso 3:
Coloca los panecillos formados en una bandeja para hornear bien engrasada o forrada con Silpat y cúbrelos sin apretar con papel de plástico.
Deje que suba hasta que se duplique, unas 2 horas en un lugar cálido.
Paso 4:
Precalienta el horno a 425 F. Coloca una rejilla para enfriar sobre un paño de cocina en tu mostrador.
Paso 5:
Para la solución de los pretzels, pon a hervir el agua, el bicarbonato y el azúcar moreno en una olla grande y amplia. Reduce a fuego lento.
Paso 6:
Deja caer con cuidado los panecillos en la solución de pretzel y cocínalos durante 1 minuto por cada lado; utiliza una cuchara grande con ranuras para darles la vuelta. Retíralos del líquido y colócalos en la rejilla de enfriamiento colocada sobre el paño de cocina para que escurran.
Paso 7:
Utiliza un cuchillo muy afilado para hacer un corte de 1⁄2 pulgadas de profundidad en la parte superior a lo largo de cada rollo.
Vuelve a colocar los panecillos en la bandeja para hornear engrasada (o forrada con Silpat) y hornea de 15 a 17 minutos, o hasta que estén dorados y cocidos.
Paso 8:
Retira con cuidado los panecillos de la bandeja del horno y deja que se enfríen en una rejilla. Si los panecillos se pegan, utiliza una espátula de metal para soltarlos.
Estos panecillos se comen mejor el mismo día que se hornean.
Nota de la receta:
Si quieres añadir sal o semillas (de amapola, sésamo o alcaravea), pincela los panecillos con un lavado de huevo (1 huevo mezclado con 1 cucharadita de agua) después de haberlos hervido y cortado y luego ponles las semillas.
ES DELICIOSA LA RECETA. GRACIAS.